DE ARTE Y TRADICIÓN
Mamerto Sánchez Cárdenas nació el 11 de mayo de 1942 en el pueblo de Quinua, Ayacucho. Aprendió a elaborar y trabajar la cerámica porque le enseñaron su abuelo, Don Francisco Sánchez, y su padre, Santos Sánchez.
Desde muy niño, Mamerto ayudaba a su padre a hacer platos y vasijas, así como a pulir y sacar brillo. Poco a poco empezó a crear sus propias piezas: vasos, candelabros, iglesias y toritos que los pobladores colocaban sobre sus techos para proteger sus casas o para tener ganado.
Mamerto Sánchez ha sido ganador de un sinúmero de premios y es actualmente considerado “Gran Maestro de la Artesanía Peruana”. Entre sus creaciones destacan la Virgen de Cocharcas, La Sirena y el Pavo Real.
Su trabajo posee un gran valor no sólo por la utilidad y belleza de sus piezas, si no porque conserva las técnicas y materiales tradicionales, además de gran parte del imaginario andino: animales y personajes míticos que dan vida a su producción.
Los pigmentos rojo, blanco y amarillo los obtiene del pozo Yanacocha, ubicado detrás del cerro Condorconca; el negro proviene de una piedra que él mismo debe quemar, moler y colar con una red muy fina.
Mamerto emplea las mismas herramientas que utilizaron su padre y abuelo para trabajar y moldear sus piezas: trozos de calabazas y maderas, carrizos, cañas, palitos…